Enbustt

2:17



Eres como el viento esgrimido en la placenta mundana
El oficio mágico de miles de sorteos nefastos de salud humana,
Silencio, simple y poderoso;
Encuentras todo tu poder en la ausencia.
Los años han girado hacia un compuesto orgánico,
Me mareo y te oigo caminar, como meciéndote en las nubes de las neuronas
Me tiño el juicio de almuerzo, sólo para decir lo que ya he dicho.
Levanto esta caída sobre mi cuello, freno, reparo en tu asiento;
Me miras, me disparas flechas de luz con tu iris
Me empecino como helecho sobre el agua, buscando,
Urgando, en las marcas cicatrizadas que dejaron los pinceles en tu cuerpo
Exiges certeras fases, crecidas desde mi interior y lloras;
El silencio se rompe, junto con tu voz,
El dato desecho de mis plegarias a la miseria
Elevándose, muy alto; tan alto como es desaparecer...
Mira el día, está bonito, es como ayer, pero es hoy.
Los días son iguales, los que cambiamos somos nosotros,
El que termina no es el verano, somos nosotros.
La que cae no es la noche, somos nosotros.
La lluvia no nos moja, nosotros nos mojamos con ella.
Y la vida no es la que se termina, nosotros nos terminamos,
Y nos quedamos habitando en la nada;
mirándolo sin prejuicios son parecidas.
Hay antros especiales para cada desarrollo infructífero,
seleccionando el preciso, todo debería andar bien,
O tomar el mal, deshidratarlo, y llevarlo en los brazos.
Si esto pasa, los brazos están permanentemente ocupados,
Y es imposible pensar en abrazar otra cosa.
Restos humanos, esparcidos, vivos aún, pero decayendo,
Empujados hacia la estrechez de la vía láctea.
Mirándonos, oliendo el ancho delirio de nuevas masas
Me aliento, a poder ofrendar al lamento. A lo simple irrecuperable.
Liquida esa edición limitada hasta el fuego
Opaca este enorme tramo de huida y bebida soporizante;
Manchada a la fuerza por tu viento, ese mismo que me envenena los huesos
Juntando asteroides venidos desde la pila madre
Sonando tan irreconocible como nunca antes,
Esguinzado, localizado en criterios yuxtapuestos
Legalizado por patriarcas... Embellecido,
Mentiroso, agujero blanco en la frente eterna
Cayendo en proyecciones matemáticas
Virtúo ese espejismo con un oasis de ecuaciones vúlvicas
Llantos, lloros, deseos de arrancarse la cabeza de un mordisco,
Te cuelas en mi coraza porque te lo permito,
Porque no hay barreras,
Sólo presagios mal escritos, en bases copulativas por temor.
Este tremor de tremores, que me impulsa a instigarme
Me vuelve un ancla para las medusas
Niego el día, la noche enjaulada, la presa favorita vestida de brecha
Me niego, me destino a autoproclamarme vencedor
Y en cada imperio hay otra hoja,
Y las hojas son las páginas de cada eco
Son el abrigo sin retardo al frenético universo
El disfraz de mis celos en la hoguera del pensamiento
Inhalando el refugio de los albatross
Meciéndome con la gracia que me quita esto
Camino, resbalo, no caigo.
Me duermo, te encuentro,
Ahí, en el sueño fatal, en la sangría de mi frente
En la espalda de mi mano, con ataduras firmes
Pero hay otro día en el horizonte negro, hay más telones
Hay más montones de pájaros muertos
Habrá más dificultad para la exclamación
Y mas cerros derretidos, mas temas descompuestos
Eso es el sentido, la girafa algebraica, la voces en el cráneo
Las galaxias coercionadas, coactivas, sin luto, sin tiempo
Blancas palomas de aire, con alas de tinta
Zurcan el espacio para tornarse hasta aquí
No hay mejor lugar para enfrentarse a las moscas
Serán compañeras en el cable de mi médula,
La caída de mis cejas en el precipicio de mis ojos
Los huevos en el acantilado negro, esperando por la descifración.
La jactación inundada de fríos botones que sirven para lo mismo,
Pero que nadie sabe que es...
Hay xilófonos pedaleando el zig-zag de los entes,
Posponiendo los atrasos para otros días de nuevas muertes
Mirando hacia el suelo,
Buscando las estrellas que cayeron por montones
Unidades cerebrales aglutinadas en parajes sencillos e incorrectos,
¿Me buscas? No es cierto.
Estás en la granja, criando yuxtaposiciones flagrantes
Llegando de a dos por cada media hora,
Te multiplicas y eres doble, dos medias partes de umbrales
Excusa perfecta para abandonarte,
Pero no lo voy a hacer, porque mi sufrimiento te asusta,
Y eso me agrada...
Será día de nuevo, y lloverá, caerán estaciones
Recuerdos pesados e imolaciones constantes,
Tatuajes del vano
Tatuajes del silencio
Tatuajes de la bendición de las ceras
Miembros de clubes fanáticos del papel
Buena cosecha, espera...
Buena cosecha.

4:50

suena como el fin del mundo! así lo veía, como tener la bacteria asesina, o acercarse lentamente a un hoyo negro. la paciencia se me ha acabado, hoy ya no me quedan ánimos para molestarme. el punto es que en algun momento algo de mí ha cambiado, me siento absurdamente tranquilo, lo cual es absolutamente peferible a la angustia.
la tranquilidad de verme y sentir que no necesito nada que no tenga. aclararse es idiota, pero necesario; es necesario ser imbécil, mucho más de lo que creo... soy influenciable, mientras quiera serlo. soy amable, mientras me den las ganas. espero seguir así, siempre empezando, no me gusta sentirme tragado por la decepción, no me gusta ir y venir. es patético, pero soy así.

terreMUTE

19:07

la legión intrangera se ha marchado,
ha visto tornarse negro el atardecer
a la noche arder y golpear su propio pecho,
autohiriéndose.
las horas, el quiebre
los palacios cólumes que se han derrumbado.
a cada instante se repite
en la cabeza de hombresmujeres
el aterrizaje de la extrema hipocresía.
la tormenta de la tierra calando en las grietas,
absorviendo vidas, renunciando a todo
demoliendo a dios.
las piedras, la adversidad intraterrestre
y ese fuego; las noches, parpadeos...
miles de parpadeos absurdos por segundo
levitaciones asmáticas en sitios inexactos
realidad vital que inventan,
se supone que la realeza se siente, pero también duerme.
se durmió en un momento intacto a otro volátil
si se lleva uno las elegías al cuerpo, no procesas,
te arqueas y vomitas lágrimas viscosas
trazos que nunca tragaste.
siéntate, calla, mira:
a lo lejos viene el rumbo,
a lo cerca llega el rumbo.
componte de uso, traga, llénate;
porque te vas,
el pístilo te lleva a su lecho,
tu lecho.